La historia más grande jamás contada
09 mayo 2018
¿Y si pudieras crear tu propio cuento de hadas? Érase una vez es un juego en el que tienes que contar una historia usando los más característicos elementos narrativos de fantasía. Animales mitológicos, brujas, hadas madrinas, reyes y reinas, bosques encantados… Pon a prueba tu imaginación, tu capacidad de soñar. Ganas si eres el primero en usar todas tus cartas y en rematar la historia con un gran final.
Cada vez que menciones un elemento de una de tus cartas puedes colocarla sobre la mesa. Si ese mismo elemento aparece en la carta de otro jugador, este puede interrumpirte y tomar el control de la historia. Al inicio de la partida cada narrador recibe varias cartas “Érase una vez”, o cartas de narración, y una carta “Vivieron felices para siempre”, o carta de final que solo puede jugarse cuando el jugador ya no tenga más cartas. Tu carta “Vivieron felices para siempre” contiene un final, claro, de cuento de hadas. Así que para poder ganar debes intentar por todos los medios que la narración tome un camino compatible con ese final.
Dentro de las cartas “Érase una vez”, sin embargo, existen varios grupos. Las cartas de personaje ya sean lobos feroces, princesas o dragones. También encuentras cartas de objetos, como espadas o encantamientos, cartas de lugares y cartas de se refieren al aspecto exterior de los personajes, lugares y objetos. Por ejemplo, un bosque puede ser alegre o un lobo puede estar disfrazado. Por último, las cartas de evento tienen que ver con cosas que pasan en el cuento, como una lucha o un encuentro. Dentro de cada grupo, además, hay determinadas cartas especiales llamadas de “Interrupción” que puedes usar para convertirte en el narrador.
Érase una vez es un juego narrativo que fomenta la creatividad, incluyendo incluso algunas cartas en blanco para que añadas elementos propios a tus historias. Refuerza, también, otras habilidades como el trabajo en equipo y la toma de decisiones. Es, por tanto, perfecto para jugadores de cualquier edad porque lo único necesario para poder alzarse con la victoria es exprimir tu imaginación.
Además de crear cartas personalizadas, las expansiones de Érase una vez te permiten añadir al mazo de cartas nuevos personajes, objetos, lugares y situaciones más específicos. Como los propios de los cuentos encantados, las gestas de caballeros o las trepidantes historias de piratas. Y si te pica el gusanillo de la escritura, con Érase una vez: Manual del Escritor aprendes a convertir las cartas del juego en una herramienta perfecta para dar forma a tus historias. Adéntrate en el mundo onírico de los cuentos con Érase una vez y construye un sinfín de aventuras.