Alíate con tus enemigos
26 febrero 2018
La mecánica de juego de Gateway Uprising reúne distintos elementos para proporcionarte una gran experiencia de juego desde la primera partida. Un tablero modular de dos caras, que representa los distritos jugables por un lado y los que son impracticables puesto que están en ruinas por el otro. Unas pinceladas de construcción de mazos, puesto que al inicio de la partida todos comenzáis con un mazo básico muy similar. Y, por último, el control de áreas que te permitirá alzarte con la victoria.
Al inicio de una partida de Gateway Uprising la única diferencia reseñable con la que partes es, quizá, la carta de líder que hayas escogido o que te haya tocado en suerte. Los poderes especiales que te proporciona esta carta te acompañarán hasta el final, pudiéndote convertir en una pieza clave del desarrollo del juego. Y es que estamos ante un título que, además de su riqueza de mecánicas, podemos decir que es semi cooperativo puesto que en muchas ocasiones vais a tener que colaborar para evitar ser salpicados por las consecuencias de una derrota o para influir en el avance de la partida. Porque si lo enemigos destruyen los territorios, de nada servirá que seas el jugador con la mejor puntuación. Sin ciudad qué salvar no puede ganar nadie. Así que en Gateway Uprising te ves abocado, la mayor parte de las veces, a enfrentarte a monstruos junto con tus rivales porque sencillamente ellos solos no serían capaces de derrotarles y a ti también te resulta imprescindible su desaparición.
En los mazos de Gateway Uprising encuentras distintos tipos de cartas, cada una con una misión. Necesitas las cartas de mercaderes, por ejemplo, para conseguir más dinero con el que comprar otro tipo de cartas y hacer crecer tu mazo. Las cartas de insurgentes, de color rojo, son las que te acompañan en la batalla contra los monstruos. Algunas de ellas te permiten realizar acciones especiales o muestran útiles habilidades con las que puedes sacar ventaja en el combate. Y luego están las cartas de apoyo, que como su nombre indica suponen un respiro para cualquier jugador. Acciones adicionales, dinero, etc… Distintos recursos a los que puedes sacar provecho en el transcurso del juego.
Una partida de Gateway Uprising consta de trece rondas y en las doce primeras se juega una correspondiente carta de eventos que afecta al transcurso de toda la ronda. Excepto la última, que se juega sin evento y al final de la cual se efectúa el recuento que determinará el ganador. Verás que tienes también a tu disposición cartas de piedras preciosas, con un efecto único que supone un as en la manga que puedes utilizar en cualquier momento. Y, si no te ves en la necesidad de jugarlas, son cartas que te proporcionan puntos de victoria para el cómputo final. Otras maneras de obtener puntos son las cartas que marcadas con un diamante azul, el control de distritos al final del juego o de la manera clásica: ganando batallas contra los infames monstruos que te quieren destruir.
Hay cuatro fases clásicas en un turno de Gateway Uprising. En la primera fase cuentas normalmente con dos puntos de acción para jugar dos cartas de tu mano, al margen de las cartas de mercaderes que no tienen coste para ser utilizadas. Al término de esta fase comienza la de reclutamiento, en la que puedes añadir a tu mazo aquellas cartas que necesites siempre que tengas los recursos suficientes para hacerte con ellas. Una vez preparado para la batalla entras en la fase de ataque. Tu ejército, representado por tus cartas de insurgentes, se mueve entonces por el entramado de distritos disponibles sobre la mesa para atacar y con suerte hacerse con algunos puntos de victoria al final del día. La última fase es la de la limpieza, en la que eliminas del tablero las cartas que ya no son necesarias y rehaces tu mano con las cartas del mazo de modo que estés preparado para continuar. En esta fase, además, la ciudad también se prepara reponiendo sus guardias y destapáis una nueva carta de eventos que determinará el transcurso de la siguiente ronda.
Y así, ronda tras ronda, en Gateway Uprising libras tu propia batalla al tiempo que contribuyes a la salvación de la ciudad sin perder la vista de tu objetivo final: ser el más laureado de los héroes legendarios, el que más puntos de victoria acumule, y convertirte así en el ganador.